19 de Noviembre de 2011
Por Daniela Ramírez Hernández. d.r.h
Muchas veces, no pensamos en como las cosas irán a suceder y terminar.
La primera vez que escuche al grupo Malpaís, estando aun en el colegio siendo muy joven, no tenía idea del impacto que su música iba a tener en mí y en miles. Ese primer concierto está grabado claramente como si fuera ayer, así a muchas otras personas ha de sucederle.
Son incontables los momentos, los conciertos, las fotografías, las estrofas que se crearon al margen de un grupo nacional. Como las personas se identificaron con siete personas distintas atraves de la música, de donde nació una amistad entre público y artistas. En donde, asistir a un concierto era mucho más que solo ir a escuchar o poner atención. Era sentirse familiarizado, era ser parte de todo esto que sucedía y nadie tuvo idea del impacto que iba a tener.
Fidel Gamboa fue uno de los músicos más representativos del país, su forma de componer, sus poemas hechos canción, sus historias en un relato con acordes. Toda su vida era su música, compartirla con el público fue un regalo único. Compartir con el público, creo miles de alegrías.
Su vida con Malpaís no tuvo un éxito garantizado al inicio, solo sucedió, solo tuvo que ser de esta manera.
Con doce años de carrera junto a Malpaís, 6 discos y miles de galardones por su trabajo; esto nunca fue pensado por ellos, y su público nunca pensó que podía llegar el día de un adiós.
Ayer, entre voces cortadas cantando, nos dimos cuenta de que por mucho tiempo será recordado Fidel.
La formula de Malpaís, fueron las canciones de Fidel, las de Jaime. Las melodías que Tapao, Daniela, Iván, Manuel y Gilberto hicieron crecer para llegar a impactar, de una o de otra forma, a las personas.
Tantas canciones que hicieron que desde niños hasta gente mayor cantaran a una sola voz. Esas canciones para una familia, para los amigos, para los enamorados y los olvidados.
No es una despedida, es un agradecimiento de tanto que dejaste a este lado del mundo. Es un recordatorio a todos de que aun él está aquí, siendo parte del viento. Así, 33 mil personas cantaron junto a vos una noche más.
Las lágrimas tuvieron que llegar también, hubo momentos muy emotivos e impactantes. En realidad no supe que fue más difícil, si escuchar tu voz y no verte ahí, o no escuchar tu voz y ver tu imagen.
Más allá de la gente que se hizo presente en el estadio, la gente desde sus hogares cantaron a todo pulmón. Por medio de Radio malpaís, gracias a su transmisión, la primera que se realizo desde el Estadio Nacional, se cruzo fronteras, para llegar a todos los países donde Fidel dejo un poco de él.
Gracias Fidel, por llenarnos con tu luz. Gracias Malpaís por hacernos sentir orgullosos del talento nacional. Gracias a los músicos que fueron parte del homenaje, y de esta noche.
Gracias a todas las personas que cantaron, lloraron, bailaron, rieron… a los que nunca van a dejarte en el olvido.
“Dame paz, dame muerte o la vida, o un tiempo más”
Tomado de www.radiomalpais.com
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